Y es que es muy fácil criticar la actuación del gobierno cuando no se tiene la responsabilidad de hacer frente a esta crisis tan grave y salvaje. Y con esto no estoy aplaudiendo el trabajo del gobierno, pero no se puede permitir a la oposición hacer sangre con mentiras de tal tamaño. Alguien se cree que vaya a hacer alguna de las contramedidas que se ha cansado de difundir, con tal de hacer caja electoral?
A nadie se le escapa que el gobierno está trabajando como pollo sin cabeza, aunque en mi humilde opinión no creo que tuviera muchas opciones más que tomar. Yo les critico las formas en las que han hecho las cosas, que han dado sensación de una mezcla de miedo, inseguridad en si mismos y falta de conocimiento, junto con una búsqueda de agradar a las grandes economías, que los ha alejado de los que les votaron.
Pero eso no implica que la oposición pueda utilizar las mentiras para intentar ganarse a la gente de a pie que ya no sabe en quien confiar. Es muy burdo el intentar convencer a la gente con frases como “si estuviéramos en el gobierno el PP no subiríamos el IVA” o “nosotros jamás congelaríamos las pensiones”, cuando las pensiones estaban congeladas cuando llegó el cambio de gobierno en 2004 y a buen seguro seguirían congelándolas si el PP volviera a encabezar las decisiones de nuestra nación.
Decía un refrán “haz lo que yo diga, no lo que yo haga” y eso mismo es lo que intentan inculcar a sus votantes el Partido Popular. Convencerles para apretarle al gobierno y que baje el IVA o que haga marcha atrás en la reforma laboral (y con esto no quiero decir que me guste la reforma laboral) sin saber muy bien por qué o si es posible.
La sociedad y buena parte de los votantes de la derecha, hacen y votan lo que les dicen que voten o hagan. Jamás se paran a pensar si les parece bien lo que dicen o no. Les convencen con frases como “los inmigrantes os quitan el trabajo y con nosotros eso no pasaría”. Claro, esta frase en ésta época de crisis muy aguda, hace que la gente los apoye con tal de que les devuelva unos puestos de trabajo (como la recolección de la fresa. La patata o la uva), que jamás quisieron coger hasta ahora y que hicieron que la inmigración fuera necesaria para cubrir los desfases estacionales entre demanda y oferta de trabajo en la agricultura.
Pero este tipo de frases, no sólo genera el apoyo incondicional al partido popular, sino que conlleva unas consecuencias mucho más graves y es que con ellas, vuelve a oírse la palabra racismo y a emerger los partidos de extrema derecha.
Estos comentarios, provocan la radicalización de los españoles sin empleo que ven en los inmigrantes una causa de su desempleo y se vuelven contra ellos. No deberíamos permitir todo en la búsqueda de votos.
En la guerra electoral no vale todo y eso debería estar muy claro y reflejado en la ley. Tal y como está la situación de delicada y la cantidad de gente que se deja llevar sin pensar y se convierten en fanáticos, no podemos permitir que se radicalice más la situación porque, y llamarme alarmista si queréis, podemos encontrarnos con una sorpresa como la del 36.
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