Tras 2 años desde que la crisis irrumpió en nuestras vidas
con más fuerza, tenemos un ejemplo que se trata de ocultar, pero que sin
embargo está consiguiendo el objetivo que se supone que se busca en toda Europa...el
crecimiento económico; estamos hablando de Islandia.
En el país ártico prevén para 2012 un crecimiento económico de un 1,5%, tras haber obtenido para 2011 un 2,1%. Y ahora agarraros a la silla porque la previsión para 2013 es la de crecer un 2,7%!
En el país ártico prevén para 2012 un crecimiento económico de un 1,5%, tras haber obtenido para 2011 un 2,1%. Y ahora agarraros a la silla porque la previsión para 2013 es la de crecer un 2,7%!
Y cómo han conseguido eso? Algún tecnócrata, tan de moda
ahora por el caso griego, seguro que diría que "el crecimiento es consecuencia deque el estado ha inyectado dinero a los bancos para que faciliten el préstamo y han tenido severos ajustes económicos
que han favorecido la recuperación”. En este caso, el tecnócrata sólo acertaría
en una cosa y sólo en parte.
Evidentemente Islandia no pudo evitar la crisis por muy
aislada que parezca estar geográficamente y el boom del 2008 le afectó como a
tantos otros países occidentales. Y es obvio que el tecnócrata acertaría al
asegurar que los islandeses han padecido ajustes económicos pero, y ahí radica la
diferencia, sólo los producidos como fruto de la natural
evolución de los acontecimientos y no por el artificio provocado en el resto de naciones.
Todos aquellos que hemos pasado por las manos de doctores en
economía a lo largo de nuestros estudios universitarios sabe lo que es
especular y en que consiste el riesgo bursátil. La explicación sencilla de la
inversión bursátil sería algo así, y que me perdonen mis profesores, como: “un
mercado hipotético de futuros, donde cada uno de los inversores arriesga su
dinero con el objetivo de obtener beneficios”.
En los últimos años han aparecidos otras bolsas como las
commodities o las de derivados; y en particular una bolsa agroalimentaria
que a mi parecer, tiene en duda su legitimidad debido a la hambruna que genera el
especular con alimentos tan primordiales en los países subdesarrollados como el
trigo o el arroz.
Sin embargo, a ningún participante en cualquiera de las
bolsas de valores, tanto las legitimadas como las no tanto, se les escapa que
al participar con su dinero, corren el riesgo de perder, verdad?
Os preguntaréis...para que narices nos suelta este sermón
sobre bolsa? Pues porque con mis escasos conocimientos en bolsa y en un idioma
ramplón he intentado explicar los pros y contras de invertir en bolsa, que nos
ayudarán a entender lo que quiero comentar a continuación.
Volvamos sobre nuestros pasos y no adelantemos acontecimientos. En 2008 estalla la burbuja inmobiliaria a escala mundial
y con ella, sale a la luz pública las aberraciones bursátiles que grupos de
inversión, aseguradoras y centenares de bancos y cajas de ahorro vienen
cometiendo desde finales del siglo XX, con la ley de liberación del suelo.
Ante la magnitud de los acontecimientos y viendo las deudas
contraídas por bancos, aseguradoras y grupos de inversión entre sí, los
grandes pensadores que parecen manejar el mundo entero decidieron que los
estados inyectaran miles de millones de euros a los bancos, con el falso pretesto de salvar
los ahorros de sus clientes. Realmente, el objetivo no era tan utópico, sino buscaba salvar el culo económico de centenares de ejecutivos y directores de banca que estaban al borde del abismo.
Sin embargo, como en la época de Asterix y Obelix, un
pequeño pueblo ártico (descendiente de los vikingos) se negó a seguir los
designios de los lobbies, el grupo Bilderberg o quien leches maneje los hilos en este
mundo contaminado en el que vivimos.
Los islandeses ante la imposición por parte de los poderes económicos de rescatar los bancos con dinero público
cómo así sucedió en el resto del mundo, promovieron un referéndum con una
encuesta sencilla “devolvemos la deuda de nuestros bancos con Inglaterra y
holanda?”. Los resultados de dicha consulta popular fueron demoledores y un
ejemplo de saber estar; el 90% de los islandeses se negaron a pagar los errores de sus bancos y los dejaron caer.
En un acto de valentía y lógica aplastante, los islandeses:
- Dejaron arruinarse a los bancos y no pagaron sus deudas a pesar de que eso les costó la negativa del FMI a darles ayuda económica y una recesión económica que asoló el país durante 2008 y 2009. Los ingleses y holandeses siguen sin conseguir su dinero.
- Obligaron a dimitir, juzgaron y encarcelaron al primer ministro de entonces
- Como el primer ministro, banqueros y altos ejecutivos también fueron juzgados y encarcelados, acusados de ser causantes de la terrible situación económica que se les venía encima.
- Ampliaron su red de seguridad social para evitar el desastre que las clases más desfavorecidas podían padecer ante las tensiones con R. Unido, Holanda y el FMI
- Nacionalizaron sus bancos para evitar que los hechos que les habían llevado a esa situación se volvieran a producir.
- Eligieron a finales de 2010 una asamblea popular encargada de redactar una nueva constitución que recoja las lecciones aprendidas a golpes en la crisis, a partir de las recomendaciones consensuadas en distintas asambleas que se celebrarán por todo el país.
Es evidente que el camino que tomó Islandia es
diametralmente opuesto al tomado por el resto del mundo, como también lo son los resultados de unas y otras políticas.
Y ahora os explicaré el por qué del sermón bursátil. En países como España, Portugal, Grecia, Irlanda o R. Unido, los gobernantes nos vendieron a los designios de banqueros, acreedores y demás actores económicos que nos metieron en este atolladero, desoyendo las protestas de millones de ciudadanos que desde Mayo de 2011 estamos gritando en las principales ciudades de nuestros países, que por cierto, son las mismas que recetan como solución a la crisis economistas como Paul Krugman o Stiglitz.
"Si tú juegas en bolsa puedes ganar, pero también puedes perder". Con el boom inmobiliario, millones de especuladores vieron como sus cuantiosas inversiones corrían serio riesgo de desaparecer; llevados por su codicia habían arriesgado y tras varios años ganando les había llegado el momento de perder.
Sin embargo, países como el nuestro diero la oportunidad a estos mismos especuladores de llevar las riendas económicas de la crisis y lógicamente, se tomaron la libertad de hacernos cargar con sus errores, actuando en contra del natural desarrollo de los acontecimientos, el ya explicado del jugar en bolsa.
Los resultados de vendernos a los especuladores son: aumento desmesurado del déficit público, paro, retroceso social, empobrecimiento generalizado y recesión económica. Y en cambio, las medidas tomadas por estos poderes económicos los enriqueció aún más, cumpliendo con la máxima de los casinos “la banca siempre gana”.
Los resultados derivados de la aplicación de los designios populares en Islandia son cuantomenos prometedores. Allí, además del ya mencionado desarrollo económico que llevan generando desde finales de 2010:
Y ahora os explicaré el por qué del sermón bursátil. En países como España, Portugal, Grecia, Irlanda o R. Unido, los gobernantes nos vendieron a los designios de banqueros, acreedores y demás actores económicos que nos metieron en este atolladero, desoyendo las protestas de millones de ciudadanos que desde Mayo de 2011 estamos gritando en las principales ciudades de nuestros países, que por cierto, son las mismas que recetan como solución a la crisis economistas como Paul Krugman o Stiglitz.
"Si tú juegas en bolsa puedes ganar, pero también puedes perder". Con el boom inmobiliario, millones de especuladores vieron como sus cuantiosas inversiones corrían serio riesgo de desaparecer; llevados por su codicia habían arriesgado y tras varios años ganando les había llegado el momento de perder.
Sin embargo, países como el nuestro diero la oportunidad a estos mismos especuladores de llevar las riendas económicas de la crisis y lógicamente, se tomaron la libertad de hacernos cargar con sus errores, actuando en contra del natural desarrollo de los acontecimientos, el ya explicado del jugar en bolsa.
Los resultados de vendernos a los especuladores son: aumento desmesurado del déficit público, paro, retroceso social, empobrecimiento generalizado y recesión económica. Y en cambio, las medidas tomadas por estos poderes económicos los enriqueció aún más, cumpliendo con la máxima de los casinos “la banca siempre gana”.
Los resultados derivados de la aplicación de los designios populares en Islandia son cuantomenos prometedores. Allí, además del ya mencionado desarrollo económico que llevan generando desde finales de 2010:
- La red de seguridad social permaneció intacta a pesar de la crisis, de haber aumentado su cobertura y en contra de los augurios de los lobbies económicos de nuestro país.
- Han promovido, según hemos sabido a través de no sin mi bici, la Iniciativa Islandesa Moderna para Medios de Comunicación (IMMI) que tiene como objetivo crear un marco jurídico destinado a la protección de la libertad de información y de expresión. Que permitirán, entre otras cosas, denunciar el salvajismo capitalista de los especuladores.
Es evidente que los beneficios obtenidos por el “método islandés”,
se oponen a los intereses egoístas y peseteros de los lobbies económicos
a los cuales, vendimos esta nación que se llama España y que nos ha llevado a un
retroceso social, educativo, económico y cultural que tardaremos muchos años en recuperar,
si es que lo conseguimos.
Sin embargo, no debemos pasar por alto el ejemplo islandés. No debemos obviar que las caceroladas, las pancartas y las acampadas surten su efecto, tienen sus consecuencias positivas siempre que persistamos con ahínco. Debemos de hacer nuestra la otra forma de hacer las cosas, de tener presente la certeza que las ruedas de molino con las que nos quieren hacer comulgar no nos llevan a nada que no sea el fin de la democracia.
Por todo ello, os invito a seguir peleando por lo nuestro, por nuestra nación, por salir de la crisis de la forma más beneficiosa para la mayoría y no sólo para unos pocos que nos metieron en la crisis por su avaricia y ahora siguen especulando sin escrúpulos.
Sin embargo, no debemos pasar por alto el ejemplo islandés. No debemos obviar que las caceroladas, las pancartas y las acampadas surten su efecto, tienen sus consecuencias positivas siempre que persistamos con ahínco. Debemos de hacer nuestra la otra forma de hacer las cosas, de tener presente la certeza que las ruedas de molino con las que nos quieren hacer comulgar no nos llevan a nada que no sea el fin de la democracia.
Por todo ello, os invito a seguir peleando por lo nuestro, por nuestra nación, por salir de la crisis de la forma más beneficiosa para la mayoría y no sólo para unos pocos que nos metieron en la crisis por su avaricia y ahora siguen especulando sin escrúpulos.
¿"a inyectado"? pedazo falta de ortografía...
ResponderEliminarTienes razón anónimo, debí de ponerle hache a ese "a inyectado" y escribirlo correctamente "ha inyectado".
ResponderEliminarGracias, lo cambio